lunes, 17 de junio de 2019

Luciérnaga

Ella irradia luz
pero no es capaz de verla.
Intuye las sombras,
percibe los colores
y no es consciente
de que están ahí por ella.

Cuando cae la noche
se cierra en sí misma,
pequeña y vulnerable
pensando que nadie la ve,
creyendo que hay otras
criaturas dignas de admirar
ingenua al paisaje nocturno
que deja a su paso.

Ella se fija en la hierba que reluce,
en los destellos en el agua.
Claudica ante un mundo
que no llega a comprender
y piensa que se apaga,
que todo es niebla y bruma
cuando se acerca.

Lo que ella no sabe
Lo que no puede ni imaginar
es que es luciérnaga,
brillante ipsa
y que, a su lado,
el Wittelsbach-Graff se me antoja,
como poco, insignificante.


jueves, 9 de mayo de 2019

Como un gato

Llegaste a mi vida como un gato.
Sin esperarlo,
sigilosamente.

Maullaste en mi puerta,
rascaste con las patas
la madera
hasta que abrí.

Y te puse de comer,
te adueñaste de mi cama,
de mi sofá,
de mis muebles,
mis toallas,
mi cocina,
mientras contenta
te acariciaba el pelo
disfrutando del tacto
de mis dedos en tu lomo,
en tu cabeza,
en tu espalda.

Hasta que un día
no volviste a aparecer.
Ya no había gato
rascando la alfombra,
dejando pelos en las mantas,
calentando las noches frías,
haciéndome sudar
pero también sonreír.
Ya no se escuchaban
maullidos, risas,
no te veía desperezarte.
Abrir los ojos y acercarte a mi boca.

Y es que te fuiste
exactamente
como un gato:
tal y como llegaste.

martes, 16 de abril de 2019

Conciencia y valores

Ojalá seas como quieras ser.
Ojalá seas donde quieras serlo.
Ojalá tus raíces arraiguen
en suelo fértil, y
ojalá la primavera permita al sol
acercarse a ti, irradiar tu luz con la suya.
Ojalá no conozcas sequía alguna, y
ojalá el agua clara como tus ojos
empape la tierra en la que creces.

Yo no quiero regarte.
Tampoco pretendo ser hibisco
que florezca radiante
a tu costa.

Pretendo ser abeja polinizadora,
importante y prescindible a la vez.
Pretendo ser viento que
te acaricie con la suave brisa,
y al que maldigas por su bravura.

Pretendo que seas,
ojalá,
a mi lado.

martes, 22 de enero de 2019

Ärenpris

Sueños de coral.
Un alma renacida abandona su crisálida
abrumada, con prisas.
Se despoja de sus restos para
tocar con los pies el gélido mármol
propio del mes de enero.

Esboza una sonrisa mientras se apura
a alcanzar el cuaderno a medio acabar,
que ya nunca volverá
a estar a medias.

Se deja caer, como quien 
se acomoda en una hamaca 
tejida por arañas
para volver a reconocerse
en el espejo que la refleja.

Y ya no la mira una extraña.
Ahora no es sino junco que se mece.

Cierra los ojos,
y se deja ser.



Málaga, 22 de enero de 2019.